El Pais, (Espagne) publie – dans son édition du 2 octobre dernier, un reportage de José Miguel Calatayud à propos d’un jeune de 14 ans, emprisonné dans son pays : le Sud Soudan. Dans les extraits ci-dessous, retranscrits du journal, se pose la question bien plus large des priorités d’un pays, même et surtout en pleine reconstruction,… à savoir l’éducation, la santé et la formation du personnel des prisons… dans le contexte de certaines coutumes qui veulent que ce soit la famille de la victime qui puisse décider de la peine
“Se llama Alphonse Kenyi. Aguarda en una prisión de Sudan del Sur a que un tribunal anule la condena a muerte dictada contra el cuándo tenía 14 años
Fue condenado por asesinatos múltiples cuando tan solo tenía 14 años . Le señalaron como miembro de un grupo que iba por la ciudad matando gente, los llamados niggers. Está en el corredor de la muerte desde octubre de 2010. Sobre él pende la sombra de la horca.
En esta cárcel hay otros 46 niños que conviven con unos 1.000 reos adultos. En el edificio contiguo hay cinco niñas.
Alphonse pasa las noches en el ala de los condenados a muerte, pero los demás menores duermen en una estancia junto a este pequeño patio cubierto por un tejadillo de metal. Se trata de una sola habitación de unos cuatro metros de ancho por unos 15 de largo. Junto a las paredes se aprietan unos 15 colchones de espuma. Son muy finos y están raidos y cubiertos por sábanas viejas y sucias. En cada uno de ellos duermen tres niños. Algunas mosquiteras penden del techo sobre los colchones, aunque no hay suficientes y están llenas de agujeros.
La mayoría de los presos adultos son ex guerrilleros que lucharon en la guerra civil que enfrentó al norte y al sur de Sudán entre 1983 y 2005.
El caso de los condenados por asesinato es particular: “la pena depende de la decisión de los familiares de la víctima”… Los familiares le piden al asesino una cantidad de dinero como compensación. Es lo que aquí en árabe llaman día y en ingles blood Money. La ley establece que los familiares pueden pedir como máximo unos 8.250 euros y esta es la cantidad solicitada en casi todos los casos. Aunque depende de las tribus, por ejemplo, otros pueden pedir 30 vacas. Cuando se fija la cantidad, el juez impone una nueva sentencia de cárcel, de hasta cinco años si es un menor y de hasta 10 si es un adulto.”
Qui êtes-vous ?
- Marc De Maeyer
- Bruxelles, Belgium
- J’ai travaillé plusieurs années dans le secteur de l’éducation en prison, à l’Unesco. J’ai visité les prisons d’environ 80 pays et ai rencontré des ministres de la justice et de l’éducation, des directeurs de prisons, des éducateurs et des détenus et leurs familles. L’objectif de ce blog est de diffuser l’information que je continue de recevoir ainsi que celle que j’ai accumulée pendant mes nombreuses années de « chercheur principal » de l’Unesco. Un autre objectif est de contribuer à nourrir une réflexion qui est loin d’être close à propos de la prison, de l’éducation, de la peine, de la réinsertion, du rôle de l’état, de la responsabilité du détenu … C’est un vaste débat que l’éducation en prison. C’est pourquoi ce site accueillera toutes les informations, présentations d’expériences, recherches et études ainsi que les initiatives gouvernementales dans ce secteur. Je peux lancer et entretenir ce blog grâce à l’appui de l’Agence Education Formation de la Fédération Wallonie Bruxelles qui a accepté mon projet d’assistanat Grundtvig à Barcelone, pour les quatre derniers mois de l’année 2011. Marc De Maeyer Barcelone, le 7 octobre 2011.
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